"¿Alguna vez has sentido que tu vida está marcada por las circunstancias? ¿Que lo que viviste en el pasado dicta quién eres hoy? Déjame contarte algo importante: es cierto que algunos factores de nuestra vida pueden parecer limitantes o determinantes. Pero, al final, son tus decisiones, no tus condiciones, las que tienen el poder de definir tu destino. Déjame mostrarte por qué, con una historia que te hará reflexionar profundamente."





 La historia de los hermanos

"Imagina esto: dos hermanos crecieron en el mismo hogar. Su padre era abusivo y alcohólico, un hombre que constantemente les recordaba todo lo que estaba mal en la vida. Cada día, los gritos, las peleas y el dolor llenaban ese lugar que se supone debería ser un refugio.


Pasaron los años y, como sucede con todos, los niños crecieron. Pero aquí viene la parte interesante: aunque compartieron las mismas circunstancias, tomaron caminos completamente diferentes. Uno de ellos terminó atrapado en el mismo ciclo que su padre: alcohol, malas decisiones y una vida llena de caos. El otro hermano, en cambio, se convirtió en un hombre exitoso, un líder admirado, y alguien que inspiraba a los demás.


Cuando les preguntaron por qué habían terminado de esa manera, sus respuestas fueron idénticas:

'Con un padre como el mío, ¿qué otra cosa podía hacer?'


¿Puedes verlo? ¡Es la misma razón, pero con un significado completamente diferente! El primer hermano usó su pasado como una excusa para justificar sus elecciones. El segundo lo usó como una motivación para romper el ciclo y construir una vida mejor."


Reconociendo las condiciones, pero enfocándose en las decisiones


"Es importante decir esto: no todas las condiciones son fáciles de superar. Algunas personas enfrentan retos que son abrumadores, como problemas de salud, situaciones de abuso o circunstancias que parecen estar fuera de su control. Entiendo que para muchos, esas condiciones pueden sentirse como cadenas que atan. Pero aquí está la clave: aunque no siempre elegimos las cartas que nos da la vida, siempre tenemos el poder de decidir cómo las jugamos.


Los hermanos de esta historia enfrentaron las mismas condiciones. Para uno, fueron una excusa; para el otro, un motor. Así que la verdadera pregunta no es qué te ha pasado, sino qué significado le das y qué harás con ello."



"Quiero que te tomes un momento ahora mismo y pienses en las decisiones que has estado postergando. Tal vez creas que no estás listo, que necesitas más tiempo o que las cosas tienen que cambiar primero. Pero déjame decirte esto: no decidir también es una decisión. Es hora de que tomes el control de tu vida. Recuerda, tus decisiones, no tus condiciones, son las que escriben tu historia. Así que... ¿qué historia empezarás a escribir hoy?"


Te Puede Interesar...